Le Tenía Miedo Al Islam Y A Los Musulmanes

¿Cómo “terminé” siendo musulmana?

Esa es la pregunta que a menudo me hacen, pero, en mi opinión, es más bien cómo tuve la suerte de ver la misericordia, el amor y la paz en el Islam, especialmente en un mundo donde los musulmanes a veces son intolerados e incomprendidos.

Mientras me siento aquí escuchando el Corán trato de recordar el momento en que me convertí en musulmana, pero no se dio en un momento, ni fue un cambio rápido…

Tuvo que pasar un período de dos años, que comenzó desde mi resistencia a cualquier religión, hasta tratar de convencer a mi pareja musulmana de que el Islam está hecho por el hombre, como todas las demás religiones, para al final descubrir la verdad sobre el Islam.

A menudo, mi corazón latería más rápido, se me pondría la piel de gallina y mi mandíbula literalmente se abría de golpe por todas las cosas que aprendía.

Sin embargo, volviendo al principio, ahora sé que hay una cosa llamada ‘Qadar Allah’, es decir, un destino predeterminado. Tu vida ya está perfectamente planificada y proyectada, pero no siempre tuve esa convicción… Creía que todo sucede por una razón, claro, pero a menudo me contradeciría al preguntarme: «¿Por qué?!», «¿Por qué esto me pasó a mí?».

Mi Pareja Musulmana

A la tierna edad de 20 años, decidí viajar. Primera parada, Egipto. Conseguí un trabajo, conocí a algunos amigos y me quedé en un complejo encantador durante meses y meses. No tenía ni una intención de conocer a un hombre, y me sorprendí cuando me encontré en una relación con un musulmán.

Pasó el tiempo, nos pusimos más serios, nos mudamos juntos y comenzamos a compartir la vida. Entonces, un día, él cambió. Comenzó a rezar todo el tiempo (ahora sé que rezaba las oraciones opcionales además de las obligatorias), comenzó a ayunar a pesar de que no era Ramadán, le gustaba escuchar Sheikhs y me mostraba algunos.

Estaba convencida de que el Islam era una religión misógina y eso me asustaba…

¿Qué pasa si mi pareja se convierte en un acosador? ¿O si empieza a despreciarme? O peor, ¿resulta ser un golpeador de mujeres? Tenía que hacer algo… Tenía que evitar que practicara el Islam.

Comencé a ver algunos programas sobre el Islam, veía una variedad de programas de diferentes sheikhs y aprendí mucho sobre el Islam de fuentes auténticas…

Además, leí muchos libros y folletos y finalmente compré mi propio Corán. Recuerdo claramente que el primer capítulo al que me salté fue Surah an-Nisa (Las mujeres), sin embargo, no entendí mucho. Pero leí de todos modos… Seguí leyendo y, algún tiempo después, llegó el Ramadán. Ya estaba en una relación con mi ahora esposo musulmán, así que lo pasamos junto con su familia.

Durante el día, nos sentábamos en silencio leyendo el Corán, todos nosotros. No me presionaron para que hiciera nada, pero me sentí alentada al saber que estoy haciendo algo nuevo, algo en lo que nunca antes había pensado…

Así que ayuné por primera vez… Logré ayunar cinco días que fueron días mágicos que nunca olvidaré…

La Búsqueda Continúa…

La búsqueda acerca del Islam continuó… mi corazón se estaba ablandando… ya no rechazaba la religión, sin embargo, no pensaba en alguna vez convertirme en musulmana, pero podía tolerar que mi compañero lo practicara.

Hablamos de matrimonio y le pedí que se casara conmigo como cristiano. Estuvo de acuerdo, pero nunca dejaría de hablarme sobre el Islam, sobre el profeta Muhammad y sobre la religión final de Dios… tuvimos tantas conversaciones interesantes y brillantes.

A menudo, íbamos a dar un paseo por las tardes después del trabajo y de lo único que podíamos hablar era de la vida, Dios, la religión, la vida después de la muerte y, por una vez, sentí que finalmente entendía todas las preguntas confusas de la vida que nadie había podido jamás responder antes.

El tiempo pasó y hasta ahora estoy asombrada y maravillada por la religión: ¿necesitamos religión en primer lugar? ¿Por qué Dios castiga a las personas? ¿Cómo puede una religión, el Islam, ser la correcta y ser para toda la humanidad? Alguien de Australia seguramente es diferente a alguien de la India, ¿pueden ambos ser musulmanes? ¿Puede el Islam ser para todos? ¿El Islam es solo para los árabes?…

Y hasta el día de hoy, nunca he pensado en una pregunta a la que no encuentre respuesta. La respuesta es «Islam».

Finalmente me di cuenta de que esta religión es perfecta y me hace sentir bien. Me anima a tomar mejores decisiones. Y tiene el poder de cambiar mi percepción sobre todo. Entiendo mi propósito y ello trajo una nueva característica encontrada que realmente no había sentido antes: la confianza.

Declarando La Shahadah

Por primera vez, tomé decisiones basadas en el Islam, en base a la guía de Dios y el consejo del Profeta. A pesar de lo que la sociedad considera normal, aceptable o deseable, no importó. Lo que importaba era convertirme en una Musulmana. Entonces lo hice.

Viajé a la mezquita Al Azhar, en El Cairo y completé un formulario, firmé mi certificado y declaré la Shahadah en el peor árabe que jamás haya escuchado, ante dos sheikhs.

Y desde entonces aprendí a recitar algo de árabe mucho mejor, pero no importó. Todo lo que importaba era que encontraba el coraje para comprometerme de todo corazón a pesar del hecho de que unos años antes, no tenía deseos de convertirme en una persona «religiosa», sino que pensaba en viajar, en dinero, maquillaje y fiestas…

Subhan Allah, ¿cuánto puedes cambiar con una influencia positiva y qué mejor influencia que el Islam?

Mientras me siento aquí y reflexiono, me doy cuenta de que ahora digo cosas que nunca imaginé antes. Toda mi perspectiva sobre la vida, las personas, los amigos y la familia cambió. Me suavicé con las personas pero soy más fuerte en mi corazón. Y perdono pero mantengo mi integridad.

Me volví tan honesta que ni siquiera diré una mentira ni en broma. Encontré un buen modelo a seguir: el Profeta Muhammad, que se preocupaba por todos, que mostró fortaleza durante las luchas y confió en Dios para todo.

Así que tuve menos temor de las personas, más temor de Dios. Ya no persigo la vida ni vivo por que se vive una sola vez, comencé a darme cuenta de que esta vida es una prueba, pero puedo ganar. Puedo dejar este mundo mejor de lo que lo encontré y ningún hecho es demasiado pequeño.

Qué hermoso es el Islam. La única religión que llama a las personas a la oración. Cinco veces al día, el Adhan se escucha en toda la ciudad, dice:

«Ven a la oración, ven al éxito».

Fuente: About Islam