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Bombero Musulmán En Nueva York Contrae Coronavirus Después De Que 3 Adolescentes «Estornudaran Sobre Él»

Un bombero musulmán de Nueva York dio positivo por coronavirus nueve días después de que tres adolescentes se acercaran y le esturnudaran a propósito, informa The New York Post.

El supuesto incidente contra Omar Sattar, de 33 años, se describe en una carta del teniente Kasey Koslowski de la compañia 282 a Thomas Richardson, jefe de operaciones del departamento.

Mientras la compañía respondió a una llamada, Sattar estaba inspeccionando un hidrante cuando se le acercaron «tres adolescentes judíos jasídicos». El trío «se burló de él y le preguntó si tenía miedo del coronavirus», dice la carta.
«Después de repetidos intentos de mantener la distancia de los muchachos, uno de ellos estornudó en su cara y salieron corriendo», dice.

El bombero comenzó a experimentar síntomas parecidos a la gripe cuatro días después de la «ocurrencia inusual», dice la carta. Posteriormente se le realizó una prueba de coronavirus y se le otorgó un permiso médico el 24 de marzo mientras esperaba los resultados. La prueba dio positivo el 27 de marzo.

«Aunque no podremos saber si este resultado positivo de la prueba COVID-19 es un resultado directo del incidente anterior, lo que sí sabemos es el continuo desprecio por parte de los ciudadanos de [Borough] Park por la política de estado de emergencia», dice la carta.

Agrega: «En un momento en que el espacio personal y el distanciamiento social están en su punto más alto, se requerirá un esfuerzo acumulativo de todos para derrotar a este virus, incluidos los residentes de [Borough] Park».
Se cree que una minoría de judíos jasídicos en Nueva York ha estado burlándose de las pautas de distanciamiento social en medio de la pandemia mortal.

En particular, uno de esos incidentes incluyó judíos jasídicos reunidos en Brooklyn para el funeral de un rabino que murió de coronavirus. La comunidad religiosa hizo caso omiso de las reglas de distanciamiento social y celebró al menos dos funerales en las calles de Brooklyn el domingo.

La policía trató de dispersar a las multitudes ordenando a los asistentes que abandonaran el área utilizando altavoces.

Se entiende que los vecindarios ortodoxos tienen un mayor riesgo de contraer el virus debido a que sus comunidades no respetan el distanciamient social, según las autoridades.