Muraqabah – Cómo La Conciencia Plena Puede Mejorar Tu Calidad De Vida
¿Qué pasaría si hubiera una manera simple de controlar tu cerebro en todos los aspectos de tu vida? Ya sea para poder superar la procrastinación, o para poder enfocarte mejor en tus oraciones, o simplemente para mejorar la calidad general de tu vida, tanto espiritual como temporalmente.
El hecho es que hay una manera de estar en control de uno mismo, y está respaldada tanto por la ciencia contemporánea como por la tradición islámica.
Es posible que hayas oído hablar del concepto de conciencia plena o mindfulness. Es un estado mental de autoconciencia logrado al enfocarte en el presente.
Piensa en una línea recta. Un extremo representa un estado de descuido, no piensas: aquí es donde reaccionas a tus pensamientos y emociones de manera instintiva y dejas que te controlen. Si algo te enoja, solo te enojas; si te sientes flojo, no te molestas en hacer nada.
En el otro extremo de la línea está el estado de conciencia plena: aquí es donde tienes la capacidad de elegir seguir o no seguir tus pensamientos y deseos.
Básicamente, controlas tus acciones. Si algo te enoja, no reaccionas; si te sientes flojo, puedes superarlo.
Los estudios han demostrado que practicar la conciencia plena disminuye el estrés, la reactividad emocional, la depresión y la ansiedad, al tiempo que mejora la memoria, la concentración y las relaciones personales, y aumenta la empatía y la compasión.
La Conciencia plena en el contexto islámico
Hay muchos tipos diferentes de prácticas de conciencia plena, como la meditación. La conciencia plena, en el contexto islámico, es muy similar a algo llamado «muraqabah».
Lograr muraqabah significa estar en un estado completo de autoconciencia alerta en la relación de uno con Allah en el corazón, la mente y el cuerpo.
Básicamente, estar en el estado de muraqabah significa conocer y encontrar la paz, en el hecho de que Allah siempre te está mirando en todo momento, tanto interna como externamente; y, en consecuencia, desarrollar una mayor atención y cuidado de tus pensamientos, acciones, sentimientos y estados internos del ser.
Cuando es bien hecho, el muraqabah tiene un doble resultado:
1- En este mundo, podrás alcanzar un estado de calma y satisfacción.
2- En la próxima vida, podrás alcanzar un estado de eterna calma y alegría en el Paraíso.
¿Cómo lograr el estado de Muraqabah?
El Muraqabah es un medio para alcanzar el estado espiritual más alto en el Islam: Ihsan, o excelencia espiritual.
El Ihsan es adorar a Allah como si lo vieras, lo que naturalmente nos devuelve a ese estado de autoconciencia.
¿Cómo podemos realmente alcanzar el estado de muraqabah o conciencia plena?
Para eso, tenemos que entender cómo se practican realmente.
La meditación es una práctica de conciencia plena y hay meditación secular y meditación islámica.
La diferencia entre las dos se remonta a los cuatro aspectos del muraqabah. Según el famoso sheikh Abdul Qadir Jilani, el muraqabah se desarrolla al:
1- Conocer o estar al tanto del Todopoderoso.
2- Conocer al enemigo, Iblis o Satanás.
3- Conocer la capacidad de tu alma para sugerir el mal, o ser consciente de ti mismo.
4- Conocer los hechos que se deben hacer por Allah.
Meditación Islámica
En la meditación secular, el propósito es lograr la fortaleza mental y el bienestar al ser conscientes del corazón y la mente propios. En otras palabras, solo el número tres de los cuatro aspectos del muraqabah.
En la meditación islámica, el propósito es lograr la fortaleza y el bienestar tanto mental como espiritual al ser conscientes de los cuatro aspectos de muraqabah a través de un marco holístico de conciencia plena islámica.
Sin embargo, lograr el número tres (ser consciente de su corazón y mente) también se enfatiza por sí solo dentro de la tradición islámica.
Se sabía que el Profeta Muhammad (la paz sea con él) observaba regularmente períodos de silencio en reclusión para cultivar la presencia, o la conciencia tranquila de la mente en el aquí y ahora.
Los predecesores justos practicaron varias formas de meditación para mejorar sus actos de adoración.
Ibn Al-Qayyim, por ejemplo, detalló siete tipos de meditación. Al-Ghazali recomendó cuatro prácticas distintas de conciencia espiritual diaria, incluida la súplica, el recuerdo de Allah, la recitación coránica y la contemplación profunda.
La idea es que una vida espiritual equilibrada depende de diferentes actos de adoración y meditaciones para un sustento completo. Entonces, ¿cómo exactamente puedes convertirte en un musulmán más consciente?
Las cuatro etapas del pensamiento
Según As-Suyuti, atraviesas cuatro etapas diferentes de pensamientos antes de poner algo en acción:
1- Al Hajis: un pensamiento repentino y fugaz.
2- Al-Khatir: Un pensamiento al que realmente le prestas atención y consideración.
3- Hadith nafs: El diálogo interno que tienes donde consideras seriamente actuar sobre ese pensamiento.
4- Al Ham y al Azm: La decisión que tomas de poner ese pensamiento en acción.
La clave es ser más consciente de la distancia entre un pensamiento, sentimiento o emoción, y tu reacción a ese pensamiento, sentimiento o emoción. Al darte cuenta de que hay una distancia, te da tiempo para controlar tu reacción.
Un ejercicio consciente para los musulmanes
1- Elije una hora del día, un área tranquila y apartada, y una postura cómoda para ti
2- Concéntrate en tu respiración natural y relaja progresivamente la tensión muscular en todo tu cuerpo, en tus brazos, piernas, núcleo y mandíbula. Lentamente calma el estado de tu corazón y mente sintiendo la vida y la energía que Allah te dio en todo tu cuerpo.
3- Percibe la sensación del muraqabah. Sepa y siente que Allah te está mirando. Silencia ese diálogo interno. Concéntrate en estar con Allah en el momento presente. Cuando te distraigas, recita los recuerdos de Allah. El profeta Muhammad (la paz sea con él) dijo:
Verdaderamente, a veces, hay una niebla sobre mi corazón, así que busco el perdón de Allah 100 veces. (Muslim 2702)
Beneficios de la meditación islámica
Recuerda que el acto de meditación consiste en regresar repetidamente al estado de muraqabah a través del dhikr hasta que se convierta en un hábito natural estar en ese estado.
El dhikr es tu ancla relajante. Si se hace regularmente, el ejercicio de conciencia plena te permitirá tener una presencia más fácil y natural en la oración; fortalece tus músculos mentales y espirituales; proporciona alivio del estrés y relajación; te da un mejor enfoque y atención; aumenta tu empatía y compasión, y lo más importante, te permitirá obtener el control de tus pensamientos, deseos y emociones.
Notarás tus pensamientos a medida que comienzan a aparecer, lo que te dará tiempo suficiente para decidir actuar sobre lo bueno y disipar lo malo.
Es posible que no siempre podamos cambiar lo que nos sucede en la vida, pero podemos cambiar la forma en que lo experimentamos y reaccionamos ante él. La ciencia moderna ha demostrado que los ejercicios de conciencia plena producen una serie de beneficios para la salud y el bienestar, incluso en un contexto no religioso.
Estas ideas se pueden sintetizar con la rica tradición de meditación del Islam para producir técnicas prácticas y contemporáneas que cultiven la conciencia plena islámica, mejoren la adoración y enriquezcan nuestra calidad de vida.
Sepan que Dios conoce lo que hay en sus corazones, así que sean concientes de Él. (Corán 2: 235)
Fuente: AboutIslam