5 Momentos Históricos En Las Relaciones Cristiano-Musulmanas Que Debes Conocer
En medio de los conflictos que se desatan actualmente en nuestro mundo, los estados de ánimo interreligiosos suelen ser extremadamente pesimistas. Podemos caer fácilmente en la trampa de pensar que la convivencia religiosa es tan difícil de lograr como rara. A la luz de esto, es un buen momento para volver a visitar 5 momentos de la historia que resaltan la realidad de que la convivencia entre el Islam y el Cristianismo es tan hermosa como puede ser abierta. Las 2 tradiciones religiosas comparten mucha teología en común, creencias y espíritu, y dentro de nuestras historias compartidas existieron grandes creyentes que aseguraron que la convivencia se realizara armoniosamente.
An-Najashi
En los primeros días de la revelación del Islam, los musulmanes fueron severamente perseguidos por los árabes paganos que habían rechazado el llamado del Profeta al Islam. Cuando esta aflicción llegó a su punto culminante, se informó que el Profeta le dijo a algunos de sus compañeros que migraran a Abisinia porque «el Rey (allí) no tolerará la injusticia y es un país amigo». El rey en cuestión era un hombre llamado Ashama o Amrah; Los musulmanes se refieren a él como An-Jasahi, lo cual significa emperador en el idioma de los abisinios. Él gobernó sobre el imperio Aksum, que hoy abarcaría gran parte del cuerno de África. Una delegación de musulmanes que buscaban refugio (aparentemente los primeros refugiados musulmanes) se dispuso a buscar la justicia de este Rey. Mientras los árabes paganos intentaron sabotear esto y convencer al rey de enviar a los musulmanes de regreso a La Meca con ellos, el rey se negó.
Al escuchar las enseñanzas del Profeta, así como los versos del Corán que relatan la historia de María, su viaje y el nacimiento virginal de un niño santo, se informa que el Rey dijo: «Ciertamente esto (los versos coránicos) y lo que Jesús había traído salió de una misma fuente…No se los entregaré (dirigiéndose a la delegación pagana) y los defenderé… Son bienvenidos, su Profeta es bienvenido… vivan donde quieran en mi país». El rey africano eligió ponerse del lado de la justicia y la compasión, fiel a los valores cristianos. Los primeros musulmanes fueron bendecidos al encontrar un amigo en este noble Rey.
Umar en Jersualén
En el año 637, la expansión musulmana había alcanzado las cercanías de Jerusalén, bajo el gobierno del califa Umar. Habiendo rodeado la ciudad, los musulmanes anticiparon una rendición del patriarca bizantino Sofronio. Sofronio se negó a entregar la ciudad a menos que el propio Umar viniera desde Medina para aceptar la rendición. Umar hizo el viaje y al llegar se le dio un recorrido por la ciudad sagrada.
Durante este recorrido, llegó el momento de la oración y Sofronio invitó a Umar a rezar dentro de la Iglesia del Santo Sepulcro. La Iglesia se encuentra entre los lugares más sagrados del Cristianismo, se cree que contiene el área en la que Jesús fue crucificado, así como su tumba, desde donde resucitó. Umar, comprometido con sus facultades de sabiduría y cortesía, rechazó la solicitud del Patriarca, temiendo legítimamente que si rezara en la Iglesia, los futuros musulmanes decidieran convertirla en una mezquita. Además de esto, Umar firmó un tratado con los cristianos de Jerusalén que incluía lo siguiente: «Él (Umar) les ha dado una garantía de seguridad para sí mismos, para sus propiedades, sus iglesias, sus cruces…sus iglesias no serán habitadas por Musulmanes y no serán destruidas. Ni ellos, ni la tierra en la que se encuentran, ni su cruz, ni su propiedad serán dañados. No serán convertidos a la fuerza».
Ricardo Corazón de León y Saladino
Mientras que las Cruzadas marcan los puntos más bajos en las relaciones cristiano-musulmanas, dentro de estas guerras sangrientas surgen los ejemplos más esperanzadores de respeto mutuo y compasión. En medio de los intentos del rey Ricardo de recuperar las tierras santas del control musulmán, cayó gravemente enfermo de malaria. Al escuchar esta noticia, el famoso comandante musulmán Saladino decidió enviar a su médico personal para ayudar en la recuperación de Ricardo. Los médicos musulmanes en ese momento estaban muy por delante de sus homólogos europeos en términos de tener una idea del campo de la medicina. Además de enviar a su médico, Saladino envió frutas y hielo para ayudarlo en su recuperación. Los dos líderes finalmente acordaron una tregua que vería cesar los intentos cristianos de retomar las Tierras Santas, mientras que a los cristianos se les garantizó el derecho de paso libre para visitar Jerusalén. Si bien esto no probaría ser el final de las Cruzadas, ni aminora las muchas atrocidades que se cometieron como parte de estas guerras, es un claro recordatorio de que incluso en los peores momentos se mostró caballerosidad y misericordia entre estos dos líderes.
La Convivencia
La Convivencia describe un momento único en la historia mundial en el que el pensamiento y la cultura islámica, cristiana y judía florecieron dentro de la «España musulmana». Mientras que algunos historiadores escriben que esto duró 4 siglos, describen particularmente los siglos IX y X dentro de la península ibérica. Dentro de este período, es bajo el gobierno del califa musulmán Abd al-Rahman III (912-961) que esta coexistencia se realizó de manera más armoniosa. Gran parte de este período se caracteriza por el florecimiento de la filosofía, la cultura y el pensamiento de las tres religiones, mientras que la participación judía y cristiana en el funcionamiento del estado alcanzó niveles sin precedentes. Mientras que algunos historiadores creen que este período ocurrió debido a razones de necesidad política y pragmatismo, los eruditos como Sachedina escriben que fue una verdadera manifestación del ideal coránico de convivencia, citando numerosos versos del Corán que hablan de la importancia de la inclusión.
El Papa Francisco y su postura sobre los refugiados
Los conflictos iraquíes y sirios, y las terribles consecuencias de estos, han visto surgir una crisis a medida que millones de refugiados buscan alivio. Si bien el populismo y la xenofobia han visto el surgimiento de muchos políticos hostiles, desde los EE. UU. y partes de Europa, el Papa Francisco ha tomado la iniciativa de promover un mensaje de compasión. El Papa se ha ganado millones de corazones y mentes con su fuerte mensaje de amor, yendo tan lejos como lavar los pies de los refugiados cristianos musulmanes, hindúes y ortodoxos para conmemorar la semana de Pascua del año 2016. En caso de que este mensaje no fuera lo suficientemente claro, ha salido con declaraciones como decir que es «hipócrita llamarse cristiano y rechazar a un refugiado». En un momento en que el miedo y la desconfianza hacia los refugiados son tan rampantes, el Papa, usando su posición y voz para emitir un mensaje de compasión es maravillosamente humilde.
Fuente: Mvslim