El Tiempo En El Corán: Sirviéndonos De La teoría De La Relatividad De Einstein

Escrito por el Dr. Ghazi Al Nakshabandi 

 

¿Cómo debemos entender los versículos del Corán en los que un día se compara con miles de años y los eventos como los del Día de la Resurrección que suenan como un viaje en el tiempo? Nuestro autor experto en física toma una pista de la Teoría de la Relatividad de Einstein.

La ciencia y el Corán como revelación

EL CORÁN CONTIENE las palabras de Dios que Él reveló a Su Profeta Muhammad ﷺ. Los tres libros sagrados que fueron revelados a los profetas antes de la revelación del Corán fueron el Tawrat (la Biblia hebrea, o Antiguo Testamento), el Inyîl (el Evangelio o Nuevo Testamento) y el Zabûr (los Salmos de David) como originalmente revelados a los profetas Moisés, Jesús y David.

El Corán no entra en conflicto con la ciencia moderna en absoluto. La interpretación de los versículos del Corán relacionados con la ciencia es una función del conocimiento científico básico de los intérpretes a lo largo de la historia islámica. Los fundamentos de los hechos científicos están en el Corán, pero están más allá de la imaginación y el conocimiento de nuestros hombres comunes. Con el avance de la ciencia y la propuesta de teorías científicas que han iluminado nuestras mentes y aumentado nuestro conocimiento, hemos comenzado a darnos cuenta de que gran parte de esta comprensión científica moderna es mencionada en el Corán. Además, algunas teorías realmente interpretan los versículos del Corán, o viceversa.

Dios es la fuente de lo que estudia la ciencia. Los detalles científicos que utilizamos en nuestra vida diaria como seres humanos son solo una pequeña parte del conocimiento, cuando se comparan con los de Dios:

Te preguntan acerca del espíritu. Diles: «El espíritu es una de las creaciones de Dios, de las que solo Él tiene conocimiento. No se les ha permitido acceder sino a una pequeña parte del inmenso conocimiento de Dios». Sûrat Al-Isrâ’, 17:85

La Interpretación contemporánea de los «signos» del Corán relacionados con la ciencia

Vivimos en un planeta relativamente pequeño, que es una entidad muy pequeña dentro del vasto universo. Dios nos ha hablado de la creación de este universo en el Tawrat, el Inyîl, así como en el Corán, en el que Dios Todopoderoso habla específicamente sobre cómo desarrolló el universo:

¿Acaso los que se niegan a creer no reparan en que los cielos y la Tierra formaban una masa homogénea y la disgregué, y que creé del agua a todo ser vivo? ¿Es que aún después de esto no van a creer? Sûrat Al-Anbiyâ’, 21:30

Estos versículos que le fueron revelados al Profeta ﷺ hace más de 14 siglos están muy por delante de las teorías modernas sobre la creación del universo. La moderna «Teoría del Big Bang» nos dice que todo el universo fue una vez una entidad, un solo punto en el espacio (1) (3), y que luego se separó (estalló) o explotó. El versículo 30 de Sûrat Al-Anbiyâ’ mencionado anteriormente nos dice exactamente lo mismo; El Corán nos habla de la expansión del universo:

Yo soy Quien construí el universo con [Mi] poder [creador]; y soy Yo quien lo expande continuamente. Sûrat Al-Dhâriyât, 51:47

¡Los científicos modernos (2) también están hablando de la expansión continua del universo!

El Corán también habla sobre el fin del universo: una «muerte» del universo y su «recreación»:

El cielo ese día será enrollado como un pergamino. Así como inicié la primera creación, la repetiré. Ésta es una promesa que he de cumplir, 21: 104.

El científico moderno dice exactamente lo mismo sobre una «muerte» del universo, su colapso o, como se le llama, el «Big Crunch» (3). En consecuencia, el comienzo del universo, su muerte, y luego, su reformación nuevamente, son eventos mencionados en el Corán; Se han propuesto teorías modernas para explicar lo que ha sucedido en nuestro universo físico, lo que está sucediendo y lo que sucederá, basándose en una observación física metódica y sistemática.

El Corán contiene palabras de Dios, como se las reveló a Su Profeta ﷺ, y éstas no contradicen la ciencia moderna.

La sugerencia de un científico

Nuestra interpretación de los versículos del Corán, cuando son relacionados con nuestro mundo físico, depende en parte del conocimiento científico actual que tenemos. Un ejemplo de eso es la interpretación del versículo,

Juro por el cosmos y el astro nocturno (الطَّارِقُ  – al-tariq). ¿Y qué puede hacerte comprender lo que es el astro nocturno? Es una estrella fulgurante (النَّجْمُ الثَّاقِبُ – An-najmu Al-thaqib). Sûrat Al-Târiq, 86: 1-3

Todas las viejas interpretaciones dicen que el Târiq es una «estrella penetrante». Sin embargo, la mejor interpretación del Târiq como se menciona en este verso, cuando se basa en el conocimiento científico actual que tenemos hoy, es «agujero negro». El Corán dice en árabe (al-najmu al-thâqib) lo cual significa «estrella que hace un agujero».

El Corán le ha pedido al creyente que piense en el significado de la creación del universo, como se observa desde nuestra tierra, como un medio para comprender su propia existencia y responsabilidad en la vida:

En la creación de los cielos y de la Tierra, y en la sucesión de la noche y el día, hay signos para los dotados de intelecto, que invocan a Dios de pie, sentados o recostados, que meditan en la creación de los cielos y la Tierra y dicen: «¡Señor nuestro! No has creado todo esto sin un sentido. ¡Glorificado seas! Presérvanos del castigo del Fuego. ÂlʿImrân, 3: 190-191

Nosotros, como seres humanos, tratamos de explicar, con la ciencia en última instancia limitada que tenemos, lo que ha sucedido y lo que está sucediendo ahora en el universo. Pero todas nuestras teorías y explicaciones no van más allá de lo que nos dice el Corán. Al mismo tiempo que los «signos» del Corán en los cielos está el entendimiento científico moderno de que el universo entero era previamente una entidad y que luego tuvo lugar el «big bang» o la expansión. ¿Alguien de la humanidad ha sido testigo de lo que sucedió? ¡Por supuesto no! Entonces, ¿cómo podría un científico esperar el fin del universo y su reformación nuevamente, a menos que hubiera «leído» específicamente en el mundo físico lo mismo que se menciona en el versículo coránico revelado, citado anteriormente, Sûrat Al -¡Anbiyâ’, 21: 104?

Como científico que cree en las escrituras reveladas, entonces, ¿no podría mencionar el Corán como referencia en mi artículo de investigación científica o teoría, como indicando el camino para mi exploración pionera? Esto no significa, por supuesto, que esté negando los esfuerzos objetivos de los científicos por hacer avanzar las ciencias. El avance de la ciencia nos acerca cada vez más a los hechos del mundo real, ya que estos se mencionan en el Corán.

La Interpretación del Corán con relación al «tiempo» terrenal

De hecho, hacemos bien en mirar en detalle la comprensión científica moderna en busca de relevancia en la interpretación de esos versículos coránicos con respecto al mundo físico. Ahora bien, ¿qué pasa con el período en el que el cuerpo humano permanece enterrado en el suelo, después de su muerte terrenal, hasta que Dios devuelve su alma a la vida el Día de la Resurrección? Este período es llamado en el idioma árabe barzakh, y su equivalente en español es «barrera». Dios está diciendo que, a los ojos de un ser humano, el barzakh es un período de tiempo muy corto desde su muerte terrenal hasta que vuelve a la vida.

Para que podamos entender lo que sucede durante el barzakh, tomemos una pista de la Teoría de la relatividad general de Albert Einstein. Según el concepto de «dilatación del tiempo» del profesor Einstein, cuando un objeto se mueve a través del espacio a una velocidad cercana a la de la luz, la percepción del tiempo por parte del espectador disminuye cada vez más. Cuando se alcanza la velocidad de la luz, la percepción del tiempo del espectador se acerca a cero y se ralentiza «infinitamente». A esta velocidad, la masa también aumenta «infinitamente». Para explicar el concepto de dilatación del tiempo de su teoría, Einstein ofreció el siguiente ejemplo:

Si se coloca a un hombre de 20 años en un cohete y se lo impulsa al espacio exterior a la velocidad de la luz, entonces el tiempo y la masa de esa persona varían como se mencionó anteriormente. Supongamos que continúa viajando a la velocidad de la luz durante un período de lo que le parece, basado en su experiencia previa en la tierra, 50 años, es decir, hasta que su edad totaliza 70 años terrestres, todo el tiempo estando en ese cohete y viajando en el espacio. Cuando esta persona regresa a la tierra, descubre que el tiempo transcurrido en la tierra no es de 50 años, sino de muchos millones de años, como Einstein lo ha calculado matemáticamente. Lo que al viajero espacial humano le parecería apenas 50 años, debido a la «dilatación del tiempo» en el espacio, ahora es vuelto a calibrar a millones de años terrestres una vez que regresa al tiempo del planeta Tierra.

La clave para comprender esto es que Einstein relaciona todos los movimientos con la velocidad de la luz. En este sentido, ten en cuenta que Dios Todopoderoso, Creador del universo, se describe a sí mismo como «Luz» (nûr) en el siguiente verso:

Dios es la Luz de los cielos y la tierra. Sûrat Al-Nûr, 24:35

Este verso del Corán se puede leer, en nuestro contexto científico moderno, para incluir el sentido de que todos los asuntos universales son administrados por Dios a la velocidad de la luz. El tiempo en nuestro planeta es una cosa relativa, y es diferente del tiempo calculado por Dios Todopoderoso, como se muestra en este verso:

Un día para tu Señor es como mil años de los que ustedes computan. Sûrat Al-Ḥajj, 22:47

Además, leemos en Sûrat Al-Sajdah, 32: 5:

[Dios] decreta todos los asuntos desde el cielo a la Tierra, que luego ascienden a Él en un día que equivale a mil años de los que ustedes cuentan.

Cuando calculas el viaje espacial de 50 años realizado por el cohete mencionado anteriormente a la velocidad de la luz, sobre la base de que un día a la vista de Dios equivale a mil años del tiempo de nuestro planeta, entonces estos 50 años en el espacio sería igual a 50x1000x365 = 18.250.000 años en nuestro planeta. ¡Así que el tiempo que habría transcurrido en la Tierra tras el regreso de la persona que viajó en el espacio durante 50 años a una dilatación temporal de la velocidad de la luz sería más de dieciocho millones de años!

El Tiempo en nuestro Barzakh y la resurrección

Ahora, cuando un humano muere y es enterrado, atraviesa una «barrera» y entra en otro lugar que en árabe se llama barzakh. ¿Cuánto tiempo pasamos en el barzakh? Solo Dios sabe cuánto tiempo será, pero después del barzakh, como se nos dice, Dios levantará a todos los muertos de sus tumbas el Día de la Resurrección, aparentemente en una «fracción de segundo»:

Cuando se sople la trompeta [por segunda vez], saldrán de sus tumbas hacia su Señor… No habrá más que un solo soplido [de la trompeta para marcar la resurrección], todos ellos deberán comparecer ante Mí. Sûrat Yâ-Sîn, 36:51 y 53

En el día de la Resurrección, Dios Todopoderoso recrea a todas las personas muertas y enterradas:

Y [este incrédulo] nos compara [con un ser creado] olvidando cómo ha sido creado él mismo, y dice: «¿Quién dará vida a los huesos cuando estén ya carcomidos?» Dile [¡oh, Muhammad!]: «Les dará vida Quien los creó por primera vez, pues Él tiene conocimiento de todos los pasos de la creación. Sûrat Yâ-Sîn, 36: 78-79

En el Día de la Resurrección, Dios Todopoderoso resucita a todas las personas; Él trae de vuelta el ruḥ (espíritu), instantáneamente, para cada persona recreada:

Será soplada la trompeta y todos los que estén en los cielos y en la Tierra perecerán, excepto quien Dios quiera; luego será soplada por segunda vez y [todos resucitarán] poniéndose de pie [para ser juzgados]. Entonces verán. Sûrat Al-Zumar, 39:68

Con respecto al momento en que Dios levanta a las personas de sus tumbas, el Todopoderoso nos informa en el Corán lo que la gente dirá sobre el tiempo que han pasado en sus tumbas:

Ese día, cuando la trompeta sea soplada, reuniré a los culpables, y sus miradas estarán ensombrecidas. Se susurrarán unos a otros, y algunos dirán: «Solo permanecimos [en la vida mundanal] diez días». Y otros, los más sensatos, dirán: «Solo permanecimos un día». Bien sé lo que dicen. Sûrat Tâ-Hâ, 20: 102-104.

Además, en Sûrat Al-Isrâ’, 17:52 leemos:

El día que los convoque responderán alabándolo, y les parecerá que no han permanecido [en las tumbas] sino poco tiempo.

El «Viaje en el tiempo» de Uzair

Todos conocemos la historia del profeta judío ʿUzair (Ezra) en el Sagrado Corán. ʿUzair pasó por la ciudad de Jerusalén después de que Nabucodonosor la destruyera. Él miró y dijo: «¿Cómo hará Dios que esto cobre vida después de su muerte?» Dios quería mostrarle que es fácil para Él dar vida a esta ciudad:

[No has reparado] en aquel [‘Uzeir] que pasó por una ciudad en ruinas [Jerusalén], y exclamó: «¿Cómo va Dios a darle vida ahora que está en ruinas?» Y entonces, Dios lo hizo morir por cien años y después lo resucitó. Le preguntó [Dios]: «¿Cuánto tiempo has permanecido así?» Respondió: «Un día o menos aún». Dijo [Dios]: «No, has permanecido así cien años, observa tu comida y tu bebida, no se han podrido, pero mira tu asno [del que por el contrario solo quedan sus huesos]. Haremos de ti un signo para la gente. Mira los huesos [de tu asno] cómo los reuní y luego los cubrí de carne [resucitándolo]». Y cuando lo vio con claridad dijo: «Ahora sé que Dios es sobre toda cosa Poderoso». Sûrat Al-Baqarah, 2: 259

Nuestro «viaje en el tiempo»

Dios nos dice que el día en que resucite a las personas, pensarán que han permanecido en sus tumbas solo una hora:

El día que los congregue, les parecerá no haber permanecido más que una hora. Sûrat Yûnus, 10:45

También,

Ten paciencia [¡oh, Muhammad!] como la tuvieron los Mensajeros con más determinación, y no te impacientes con ellos. El día que [los que se negaron a creer] vean aquello con lo que se les había amenazado, pensarán que estuvieron en la tumba solo un instante del día. Sûrat Al-Aḥqâf, 46:35

Cuando los Compañeros del Profeta ﷺ le preguntaron sobre el Día de la Resurrección y el tiempo que pasarán en sus tumbas, Dios reveló Su respuesta:

El día que lo vean suceder, les parecerá haber permanecido en la vida mundanal solo el tiempo equivalente a una tarde o una mañana. Sûrat Al-Nâziʿât, 79:46.

Tiempo y velocidad del espíritu

¿Por qué la gente sentirá el Día de la Resurrección que ha permanecido en sus tumbas por muy poco tiempo? La explicación de eso, y Dios sabe mejor, es que cuando una persona muere, su cuerpo permanecerá en la tumba en un plano temporal, o «horizonte», es decir, el del tiempo terrestre, pero que su espíritu (ruḥ) se irá a otro plano, u «horizonte» del tiempo. Solo Dios sabe «adónde» va el espíritu, pero donde sea que esté, Dios nos da la respuesta en cuanto a la velocidad del espíritu cuando hace su ascenso final a Dios en ese Día:

Alguien pide que se desencadene el castigo prometido para que caiga sobre los que niegan el Mensaje. Cuando ocurra, nadie podrá impedirlo, pues procede de Dios, Señor de las vías de ascensión, por las que ascienden hacia Él los ángeles y las almas; un día que durará cincuenta mil años. Sûrat Al-Maʿârij, 70: 1-4

En este verso vemos que la velocidad del espíritu, cuando regresa a Dios, es como 50 veces más que la velocidad de la luz, según la forma en que estaba tentativamente «calculada» sobre la base de las palabras en Sûrat Al- Nûr, 24:35 y Sûrat Al-Sajdah, 32: 5.

El Viaje en el tiempo del espíritu

Cuando el espíritu viaja a una velocidad excesivamente alta fuera del cuerpo de una persona dormida o muerta, y luego nuevamente con su cuerpo recreado viaja de regreso a Dios en el Día de la Resurrección, el elemento tiempo se acercaría a cero, cuando se entiende de acuerdo con la teoría de Einstein como se menciona aquí; en consecuencia, la persona recreada se sentirá como si hubiera permanecido en su tumba un período de tiempo cercano a cero: «una hora», «dos horas» o «parte de un día».

El Corán y la ciencia

Este artículo está destinado a mostrar la conformidad de los hallazgos científicos con el lenguaje coránico sobre nuestro mundo natural, y especialmente a proponer una comprensión del cómputo del tiempo como se presenta en los versículos del Corán relacionados con los próximos eventos en el barzakh y el Día de la Resurrección. Sugerimos que la Teoría de la Relatividad de Einstein, en particular el concepto de «dilatación del tiempo», que entra en juego para el movimiento de la velocidad de la luz, explica de manera plausible lo que de otro modo podría objetarse como una falta de coincidencia entre el tiempo experimentado en la Tierra y las apreciaciones del tiempo relacionadas con la tumba y los eventos del Último Día, tal como se redacta meticulosamente en el Corán para que reflexionemos.

Y Dios Todopoderoso sabe más.

 

 

Fuente: Revista Al-Jumuah

Referencias:

(1)NASA Science: Astrophysics

http://science.nasa.gov/astrophysics/focus-areas/what-powered-the-big-bang/

(2) The Hubble Expansion: The Hubble Expansion—UC Berkeley Astronomy Departmentastro.berkeley.edu/ ṭmwhite/darkmatter/hubble.html‎

(3)The Physics of the Universe: http://www.physicsoftheuniverse.com/topics_bigbang_accelerating.html