12 principios que hacen a un verdadero musulmán
Escrito por el Dr. Muzammil H. Siddiqi
Los musulmanes creen que Surat Al-Israa’ fue revelada al Profeta Muhammad (la paz sea con él) en La Meca después de su Viaje Nocturno de La Meca a Jerusalén. En esta sura, Dios menciona algunos compromisos básicos de un verdadero musulmán. Sin cumplir con estos compromisos, ningún individuo o grupo puede tener éxito. Los musulmanes tienen que vivir de acuerdo con estos valores y deben invitar a la humanidad a seguir estos principios. Estos principios no se limitan a una raza, tribu o grupo; son universales en su alcance y aplicación. También se les llama hikmah o las enseñanzas de la sabiduría. Si son seguidos correctamente, son capaces de aumentar la bondad y la sabiduría de todas las personas. Estos principios son los siguientes:
1 – Adorar solo a Dios
Tu Señor ha ordenado que no adoren sino a Él. (17:23)
Esto significa reconocer a Dios como la realidad suprema y reconocer a Dios como el Señor, adorarlo con toda sinceridad y someterse a Él en todos los aspectos de la vida. La vida de un musulmán no es más que un compromiso total con Dios. No solo somos monoteístas, sino que también somos personas teocéntricas. Dios es el centro de nuestra vida y Él es nuestra máxima y total preocupación.
2- Ser respetuoso y amable con los padres
Tu Señor ha ordenado que no adoren sino a Él y que honren a sus padres. Si uno de ellos o ambos llegan a la vejez, no sean insolentes con ellos, ni siquiera les digan: «¡Uf!» Háblenles siempre con bondad. Trátenlos con humildad y compasión, y rueguen [por ellos diciendo]: «¡Oh, Señor mío! Ten misericordia de ellos como ellos la tuvieron conmigo cuando me criaron siendo niño». (23-24)
Se trata de reconocer la compasión y la bondad de los padres, estar agradecido con ellos y hacer todo lo posible para corresponder ese amor y compasión. La piedad y la devoción filiales es el segundo compromiso más importante de los musulmanes. El respeto y la amabilidad hacia los padres no es solo un deber social para nosotros; es nuestro deber y obligación religiosos.
3 – Ser bueno con los familiares, los pobres y los viajeros
Da a los parientes lo que es su derecho, también al pobre y al viajero insolvente, pero no derroches. (26)
Esto es para recordar que estamos interconectados en este mundo. Nuestras responsabilidades no son solo para con nosotros mismos y nuestras familias inmediatas, sino también con otros parientes y con la sociedad en general. Todos nos necesitamos unos a otros y todos somos compañeros de viaje en este camino de la vida. Debemos ver qué podemos hacer por los demás. Los musulmanes deben vivir una vida socialmente responsable. La responsabilidad social comienza con la familia y otros parientes e incluye a todos los necesitados.
4 – Tener cuidado con el dinero y no desperdiciar recursos
Da a los parientes lo que es su derecho, también al pobre y al viajero insolvente, pero no derroches, porque los que derrochan son hermanos de los demonios, y el demonio fue ingrato con su Señor. No seas avaro ni tampoco derrochador, porque te verás censurado [en el primer caso] y arruinado [en el segundo]. Tu Señor concede un sustento abundante a quien quiere, y se lo restringe a quien quiere. Él a Sus siervos los conoce bien, y los ve siempre. (17: 26-27, 29-30)
Uno no debe ser ni demasiado apretado con el dinero ni demasiado flojo con él. La extravagancia no está bien, pero tampoco uno debe volverse tacaño y avaro. Un verdadero musulmán está comprometido con un estilo de vida equilibrado. El dinero debe ganarse de manera halal (legal) y debe gastarse de la manera correcta. Este principio se puede aplicar a todos los recursos que Dios nos ha dado. El uso sabio y concienzudo de los recursos es un compromiso muy importante de los musulmanes.
5 – Cuidar bien a los niños
No maten a sus hijos por temor a la pobreza. Yo los sustento a ellos y a ustedes. Matarlos es un pecado gravísimo. (17:31)
Como reconocemos los derechos de los padres, también debemos reconocer los derechos de los niños. Nuestros niños son nuestro futuro. Debemos asegurarnos de que criamos niños sanos, inteligentes y moralmente responsables. Nuestro compromiso debe ser criarlos en un entorno seguro y saludable. Debemos proteger su vida, así como su espíritu y su mente, su moral y sus modales.
6 – Evitar el adulterio y las relaciones ilícitas
No se acerquen a lo que lleve a la fornicación, pues es una inmoralidad y un mal camino. (17:32)
Las perversiones sexuales traen el mayor daño a los individuos y sociedades. Observar las reglas adecuadas en este asunto conduce a la salud, la felicidad y una sociedad moral buena. Los musulmanes están comprometidos con un estilo de vida puro, limpio y socialmente responsable. El Islam enseña que uno no debe ni siquiera acercarse al adulterio o la fornicación. Esto significa códigos de vestimenta adecuados para hombres y mujeres, comportamiento adecuado en sociedades mixtas y control adecuado de las relaciones sociales y el entretenimiento.
7 – Respetar cada vida y no matar a nadie a menos que sea en busqueda de la justicia
No maten, pues Dios lo ha prohibido, salvo con motivo justo. (17:33)
Esto significa que uno debe reconocer la santidad de toda vida y no debe hacer nada que pueda ponerla en peligro. Uno debe evitar la agresión y la violencia, porque estas cosas conducen al asesinato. Todo musulmán debe comprometerse con caminos pacíficos. Los conflictos deben resolverse mediante el diálogo y las negociaciones, no mediante violencia y asesinatos. Sin embargo, se debe mantener la justicia, porque el castigo justo trae seguridad y protege la vida.
8 – Cuidar a los huérfanos
No utilicen los bienes del huérfano a menos que sea para beneficiarlo, y entréguenselos cuando alcance la madurez. (17:34)
Hay que cuidar de los huérfanos y de todos los vulnerables. Debemos reconocer sus derechos y protegerlos de todo daño. Un musulmán debe estar profundamente comprometido con el cuidado de los jóvenes, los pobres, los enfermos y los discapacitados. La bondad y la compasión es el compromiso básico de un musulmán. Incluye a todos e incluye a los animales.
9 – Cumplir promesas y compromisos
Cumplan con sus compromisos, porque se los interrogará por ellos. (17:34)
Las promesas y los contratos son una parte importante de la vida y la civilización humana. Cuando las promesas no son cumplidas, las personas pierden la confianza entre sí y toda la sociedad se debilita. Los musulmanes deben ser fieles a sus palabras. Nuestro compromiso debe ser decir la verdad y ser honestos y cuando hacemos una promesa debemos hacer nuestro mejor esfuerzo para cumplirla.
10 – Ser honesto en las transacciones comerciales
Midan y pesen con equidad. Esto es lo más conveniente y mejor para ustedes. (17:35)
Los negocios honestos traen progreso, éxito y bendiciones. Todos los negocios, ya sean comerciales, sociales o políticos, deben realizarse con un sentido de justicia y equidad. Un verdadero musulmán está comprometido con el trato justo en todo y con todos. Tratar con un musulmán verdadero significa tratar con total confianza. Un hombre de negocios musulmán debería ser el más veraz. Un trabajador musulmán debería ser el trabajador más honesto. Entonces, un musulmán en cualquier profesión debería honrar esa profesión.
11 – Actuar sobre la base del conocimiento y no seguir rumores o actuar sobre verdades a medias
No hagan ni digan nada si no tienen conocimiento. Serán interrogados acerca de [lo que hayan hecho con] su oído, vista y corazón. (17:36)
Las agencias de información, los medios de comunicación, tienen una gran responsabilidad. Se comete mucha injusticia cuando se proporciona información errónea o es utilizada incorrectamente. Los musulmanes deben ser veraces en la información. Deben promover informes veraces y honestos sobre todos, incluidos sus enemigos. Un informe procedente de una fuente musulmana debería ser el informe más fiable. De manera similar, los musulmanes deben tener mucho cuidado con sus acciones y reacciones. No deben reaccionar contra todos sin las pruebas adecuadas.
12 – Ser humilde y no arrogante
No caminen por la Tierra con arrogancia, pues ella no se abrirá por su andar, ni tampoco podrán igualar a las montañas en altura [para ser tan imponentes como ellas]. (17:37)
La moderación y el equilibrio es lo mejor tanto en el comportamiento como en la actitud hacia los demás. Un verdadero musulmán es una persona digna, pero humilde. Y un musulmán no es jactancioso o arrogante. Un verdadero musulmán agradece a Dios por todos Sus dones. Para todo, la máxima alabanza es para Dios y la verdadera gloria pertenece a Dios.
Estos son los compromisos básicos de los musulmanes como individuos y como personas. Estos son los principios de la sabiduría y los valores universales del Islam. Seguirlos trae justicia, paz y felicidad en este mundo y ciertamente traerán éxito y salvación en el Más Allá. Intentemos todos hacer de estos nuestros compromisos reales.