El Matrimonio de Aisha en el Foco

Por Theresa Corbin

He escrito sobre esto en el contexto de otros temas un par de veces, pero pensé que la edad de Aisha (que Dios esté complacido con ella) al casarse merecía una publicación por sí sola. Porque mucha gente tiene la misma pregunta: ¿Por qué el Profeta (la paz sea con él) se casó con Aisha cuando esta era tan joven?

No sabemos la edad de Aisha cuando se casó con el Profeta Muhammad (la paz sea con él). Lo que pasa es que no guardaban registros de nacimiento en esos días. Tampoco celebraban cumpleaños ni tampoco llevaban un registro de la edad. Tenemos informes de que Aisha tenía entre 9 y 18 años en el momento de su matrimonio.

Lo que es importante para nosotros entender sobre el matrimonio de Aisha con el Profeta es que no podemos aplicar los estándares de nuestra época a las personas de hace más de 1.400 años y viceversa. Cuando las personas ponen las vidas de hace 1400 años en el contexto del siglo XXI, es como si admitieran no comprender el contexto histórico o no haber tomado alguna clase de Historia en sus vidas. Y eso es simplemente triste.

La vida en el siglo VII

No vivimos en el mismo mundo en absoluto. En el siglo VII, no se garantizaba que la gente llegara a los 30 años. La gente maduraba temprano y estaba lista para el matrimonio mucho antes. Mirando hacia atrás, incluso hace unos pocos cientos de años, la edad legal para contraer matrimonio era tan temprana como cualquier edad entre los 10 y los 14 años.

Richard A. Posner, juez principal de la corte de apelaciones de EE. UU. escribe: “La ley que rige la edad de consentimiento ha cambiado drásticamente en los Estados Unidos durante este siglo. La mayoría de los estados codificaron una edad legal de consentimiento durante el siglo XIX, y la edad habitual era de diez años». [1]

El matrimonio en el siglo VII

La práctica de casarse temprano no fue una aberración para la gente durante la época del Profeta Muhammad y Aisha. Cristianos, judíos y paganos se casaban muy jóvenes. Entonces, si vamos a criticar el matrimonio del Profeta Muhammad con Aisha, ¿por qué no tenemos un problema con que el rey Juan de Inglaterra se case con Isabel de Angulema, de 12 años?

Así era como funcionaban las cosas en ese entonces para todos.

Educación y matrimonio

Una de las muchas buenas razones por las que nos casamos hoy (o podemos dar nuestro consentimiento) después de los 18 es por nuestro sistema educativo. Vamos a la escuela hasta los 18 años en la mayoría de los casos, a veces mucho más, a veces un poco menos. Pero 18 es el momento en el que nosotros, en la sociedad occidental, tendremos suficiente educación para tener el potencial de triunfar en la sociedad: conseguir un trabajo, saber cómo funcionan las cosas, estar informado sobre nuestro gobierno.

Pero en el pasado, e incluso hace un siglo, la educación estaba muy truncada. La gente ya aprendía todo lo que tenía que aprender a una edad temprana. Aisha estaba completamente educada en las formas y los medios de vivir en su sociedad en el momento de su matrimonio. Y además de estar completamente educada en su contexto, se casaba con un hombre que le daría aún más educación. De modo que su matrimonio fue ventajoso para su educación y no una interrupción de la misma.

Aisha se convirtió en una de las más grandes eruditas del Islam debido a su matrimonio. Mucho de lo que sabemos sobre el Islam hoy proviene de su erudición.

El matrimonio y el consentimiento de Aisha

También tenemos que tener en cuenta el consentimiento. Trágicamente, a la mayoría de las mujeres en la época de Aisha no se les pidió su consentimiento en sus matrimonios. A Aisha sí. Y ella consintió. El Islam exige consentimiento.

¡Oh, creyentes! Quedan abolidas las costumbres [paganas preislámicas] de heredar a las mujeres como un objeto y de obligarlas a casarse […] (Corán, 4:19).

También estuvo comprometida con otra persona incluso antes en su vida. Para este compromiso, no se había solicitado su consentimiento y el compromiso se rompió.

Madurez

Además de haber completado su educación contemporánea, haber dado su consentimiento, Aisha también había alcanzado la madurez. Maduró temprano en una sociedad donde tenía que madurar temprano porque la vida era bastante dura y decididamente corta. Si el matrimonio no hubiera ocurrido una vez alcanzada la madurez, no estoy segura de que nosotros, como especie, hubiéramos sobrevivido.

Además, sabemos que Aisha era considerada una adulta en su contexto porque en el Islam, un niño ni siquiera puede dar su consentimiento para el matrimonio o cualquier contrato legal como un contrato de boda. La edad a la que uno puede consentir en casarse es cuando una persona ha crecido completamente y ha alcanzado la madurez total (física, emocional y mental) y la fuerza de la edad adulta, que varía de persona a persona, de época a época y de sociedad a sociedad. (Corán 22: 5, 40:67, 6: 152, 17:34).

Utiliza tu contexto

No podemos juzgar a las personas de hace siglos atrás con nuestros estándares y parámetros. Decir que el matrimonio de Aisha con el Profeta Muhammad fue una especie de crimen es como decir que el Profeta fue duro porque no permitió que ninguno de sus compañeros tuviera una cuenta de Twitter. ¡Es absurdo! Tenemos que poner las cosas en su contexto.

Ahora, para aquellos musulmanes que piensan que los matrimonios a edades tempranas todavía están bien, han perdido la cabeza. Los mismos puntos que hago también funcionan a la inversa. Hoy en día no maduramos tan rápido y no estamos listos para el matrimonio tan pronto como la gente lo estaba en el pasado, y usar el matrimonio de Aisha como ejemplo para casarse con niños en nuestra época tiene serias fallas y una terrible tergiversación del Islam porque no tienen en cuenta las diferencias sociales en nuestro mundo a través del tiempo. Se trata de contexto.

1 – A Guide to America’s Sex Laws by Richard A. Posner & Katharine B. Silbaugh página 44

Fuente: About Islam

Acerca de Theresa Corbin

Theresa Corbin es autora de The Islamic, Adult Coloring Book y coautora de The New Muslim’s Field Guide. Corbin es una estadounidense criolla francesa y musulmana que abrazó el Islam en el año 2001. Tiene una licenciatura en literatura inglesa y es escritora, editora y artista gráfica que se enfoca en temas de conversión al Islam, islamofobia, problemas de mujeres y puentes entre los pueblos de diferentes religiones y culturas. Es colaboradora habitual de AboutIslam.net y la revista Al Jumuah. Su trabajo también ha aparecido en CNN y Washington Post, entre otras publicaciones. Visita su blog, islamwich, donde analiza la intersección de la cultura y la religión.