¿Son todos los no musulmanes enemigos del Islam?

Por Tabassum

 

Pregunta: ¿Sabes quiénes son las primeras personas a las que Dios se dirige directamente en el Corán?

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¿Te has encontrado con situaciones en las que, después de que ocurre una tragedia entre los no musulmanes, como una inundación o un tiroteo, escuchas a los musulmanes a tu alrededor decir: «Tienen lo que se merecen»? Yo sí.

Y estas personas no son solo fanáticos religiosos. Son personas normales como tú y como yo. Y seamos honestos, puede que tú y yo tengamos una pizca de esta mentalidad en nosotros mismos.

¿De donde viene esto? ¿Cuánta verdad hay en ello? Estas son preguntas complicadas y están fuera de nuestro alcance para responder. Pero veamos algunos asuntos prácticos.

¿Quién es un no musulmán? Un no musulmán NO es una persona condenada al infierno. Es una persona que aún no ha aceptado el Islam.

Imagina que estás viviendo en la época del Profeta Muhammad, en la Meca durante los primeros años del Islam, y alguien te dice: “¿Conoces a ese sujeto, Umar ibn al-Khattab? Creo que se convertirá en musulmán en unos años”.

“¿Umar? ¿El que azota a los musulmanes? ¿El que es un enemigo abierto del Islam?»

Te habrías reído en su cara y le hubieras dicho que se hiciera revisar el cerebro. Y, sin embargo, eso es lo que sucedió. Umar, uno de los enemigos más acérrimos del Profeta (la paz sea con él) al comienzo de su profecía, se convirtió en uno de los mejores musulmanes de la historia y recibió las buenas nuevas del Paraíso incluso antes de su muerte.

El caso es que nunca se sabe.

Dios Todopoderoso dijo sobre algunos no musulmanes que sus corazones están cerrados y nunca creerán:

A los que niegan la verdad les da lo mismo que les adviertas o no, no creerán. Dios ha sellado sus corazones y sus oídos, sobre sus ojos hay un velo y recibirán un castigo terrible. (2: 6-7)

Pero, ¿quiénes son estas personas de las que se habla en estos versículos? Definitivamente no Umar. Nunca podemos predecir en este mundo quiénes están condenados y quiénes no.

Lo que sí sabemos en este mundo es que, antes de ser etiquetado como “musulmán” o “no musulmán”, uno es un ser humano. Hay una hermandad más allá de la musulmana. Los no musulmanes lo saben, quizás mejor que muchos musulmanes.

Entonces descubres que una mezquita en Quebec es atacada, matando a seis musulmanes, y al próximo viernes, un rabino pide a las personas en siete lugares de Toronto que formen barreras humanas de múltiples religiones para proteger a los musulmanes que rezan Yumuah. Una hermana que fue a asistir a una oración el lunes siguiente encontró a una persona que llevaba un cartel que decía:

«Estamos UNIDOS con nuestros hermanos y hermanas musulmanes».

Cuando se incendió otra mezquita en Texas, los judíos de la ciudad entregaron una llave de su sinagoga a los fundadores de la mezquita.

¿Te recuerda esto a algo de la biografía del Profeta Muhammad (la paz sea con él)?

Cuando los enemigos del Profeta de entre los Quraysh exigieron a su tribu que se lo entregaran, toda su tribu, musulmanes y no musulmanes, lo defendió. Y al frente de esta gente estaba su tío Abu Talib, un no musulmán.

¿Por qué? Porque estas personas entendieron lo que muchos de nosotros, musulmanes, no entendemos: que todos somos hermanos y hermanas, si no en la religión, entonces en la humanidad, como dijo el Profeta:

«Todas las personas son hijos de Adán, y Adán fue [creado] del polvo». (Tirmidhi 3955)

Se podría argumentar que los locos que prendieron fuego a la mezquita en primer lugar no eran musulmanes. Al respecto, Dios dice:

Dios no les prohíbe hacer el bien y tratar con justicia a quienes no los han combatido por causa de la religión ni los han expulsado de sus hogares, porque Dios ama a los que actúan con justicia. Dios solo les prohíbe que tomen por aliados a quienes los combaten a causa de la religión y los han expulsado de sus hogares o han contribuido a su expulsión. Sepan que quienes los tomen como aliados estarán cometiendo una injusticia. (60: 8-9)

El verso divide a los no musulmanes en dos categorías. Las personas que prendieron fuego a las mezquitas y mataron a musulmanes inocentes no están en la misma categoría que las que protegen y apoyan a los musulmanes.

¿Sabes quién es el primer grupo de personas a las que Dios se dirige directamente en el Corán?

A la humanidad.

¡Oh, seres humanos! Adoren a su Señor que los creó a ustedes y a quienes los precedieron, para que así alcancen el temor devocional de Dios. (2:21)

Ibrahim (la paz sea con él) solía llamar a su padre fabricante de ídolos, «¡Ya abati (oh mi padre amado)!» Y el Profeta Muhammad (la paz sea con él) amaba a Abu Talib más allá del amor de cualquier hijo por su padre; y Abu Talib, a su vez, lo amó y protegió, y pasó hambre durante tres años para protegerlo de posibles asesinos. Si eso no es amor, ¿entonces qué es?

“En lo que ellos creen, ellos creen; eso es entre ellos y Dios, no entre ellos y nosotros». – Nouman Ali Khan

 

Fuente: About Islam

 

Acerca de Tabassum

Tabassum es un escritor independiente y estudiante de Alimiyyah en línea en el Instituto Al-Salam, Reino Unido. ihsan.life