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La espiritualidad islámica en el mundo moderno

Por Theresa Corbin

 

Tan pocas personas piensan en la necesidad de su espíritu, de su alma, y tantas cosas hay para llenar (mal) ese lugar donde debe crecer la espiritualidad.

Comemos demasiado, tratando de llenar el vacío y amortiguar el sentimiento de un alma vacía, para olvidar la voz persistente de algo profundo en nosotros que anhela estar conectado con Dios. Compramos, escuchamos, miramos, comemos, bebemos, el hambre espiritual desaparece. ¿Pero funciona?

Algo falta

La modernidad marca, quizás, la primera vez en la Historia humana en que un gran grupo de personas rechaza el concepto de Dios. Con esto, rechazan la idea de su propia alma y todo lo que la nutre. Pero el hecho de que rechacemos una idea no significa que desaparezca. Todos sentimos el anhelo de nuestras almas cuando ha sido descuidada. En el fondo hay algo que falta.

Quizás el aumento del suicidio, la depresión y la ansiedad son marcas devastadoras de esta falta de espiritualidad humana en nuestra era moderna. El ser humano necesita sentirse realizado de manera espiritual. Y cuando negamos este aspecto de nuestra naturaleza, se vuelve doloroso.

Dina Mohammad Basiony, editora de espiritualidad en Productivemuslim.com y consejera de Ask About Islam, escribe:

“La espiritualidad en el Islam es más que un sentimiento. Es el verdadero conocimiento de La Fuente del Espíritu, la búsqueda sincera de Él, la conexión persistente con Él y el compromiso de amarlo y permanecer en Su camino hasta El Día en que nos encontremos con Él. Entonces, es un viaje de vida de crecimiento, sinceridad y compromiso con El Creador (La Fuente del espíritu), no un momento fugaz de emoción o impulso espiritual”.

Esta explicación es sorprendentemente similar al amor. ¿Cómo llegamos a amar a alguien? Llegamos a conocerlo a él o ella y todos sus buenos rasgos. De esta manera, llegamos a la espiritualidad conociendo a Dios y sabiendo que Él posee lo mejor de todos los rasgos en su forma superlativa. ¿Cómo conseguimos que el objeto de nuestro amor nos corresponda? Lo perseguimos. De manera similar, nos volvemos espirituales al seguir a Dios, buscando Su complacencia en todo lo que hacemos.

¿Cómo mantenemos una conexión con el que amamos?

Cultivamos la relación, continuamos conociendo a la persona que amamos. Ayudamos a que la conexión crezca evitando lo que desagrada y haciendo todo lo que agrada a quien amamos.

Esto es espiritualidad. Es un sentimiento producido a través del conocimiento, la búsqueda y el compromiso con la fuente y el destino del amor: Dios.

Confía en Dios

De esta manera, la espiritualidad es lo que nos ancla. Cuando nuestra confianza es rota por una parte de la creación, todavía creemos en la confianza final del Creador. Cuando nuestro corazón es roto por alguien cercano a nosotros, sabemos que el amor mismo no está roto porque el Dueño y Creador del amor es Eterno. Cuando ocurre una tragedia, sabemos que Dios está con nosotros y nos prepara una recompensa increíble por nuestra paciencia.

De esta forma, la espiritualidad es consuelo para el alma en un mundo incierto. Se convierte en una forma de hacer frente a todo lo que la vida nos depara. La espiritualidad se convierte en una forma de mantenerse enraizado en lo que es realmente importante y no en lo que es solo una distracción de esta vida.

Pero en lugar de trabajar hacia la espiritualidad, muchos de nosotros hemos seguido el culto a la felicidad. No hay nada de malo en ser feliz o buscar la felicidad. Pero se nos dice que encontraremos la felicidad en actividades en su mayoría egoístas: ir de compras, comer, beber, ir a discotecas, lujuria, etc.

Los humanos modernos buscan servirse a sí mismos de esta manera, siempre buscando ser «felices» satisfaciendo sus propios deseos y nunca sintiéndose realmente satisfechos, siempre siendo empujados a consumir más, mirar más, tomar más.

En contraste directo con la creencia común de que la felicidad proviene de actividades superficiales, los psicólogos han descubierto que las personas que abordan la vida a través de su espiritualidad experimentan mucha más felicidad que aquellas que creen que la felicidad proviene de actividades egoístas.

Las personas que tienen la espiritualidad en sus vidas informan ser «muy felices», tienen una vida más larga, tienen un menor riesgo de depresión y suicidio, son más resilientes, son más fieles en las relaciones y están más satisfechas con su vida familiar.

Hay pocos en el mundo moderno que no están en busca de la felicidad. Irónicamente, cada vez menos de nosotros somos realmente felices. Entonces, quizás lo que realmente estamos buscando es la espiritualidad.

 

Fuente: About Islam

 

Acerca de Theresa Corbin

Theresa Corbin es autora de The Islamic, Adult Coloring Book y coautora de The New Muslim’s Field Guide. Corbin es una estadounidense criolla de ascendencia francesa y musulmana que abrazó el Islam en el año 2001. Tiene una licenciatura en Literatura Inglesa y es escritora, editora y artista gráfica que se enfoca en temas de conversión al Islam, islamofobia, problemas de mujeres y puentes entre pueblos de diferentes religiones y culturas. Es colaboradora habitual de AboutIslam.net y de la revista Al Jumuah. Su trabajo también ha aparecido en CNN y Washington Post, entre otras publicaciones. Visita su blog, Islamwich, donde analiza la intersección de la cultura y la religión.