Factores detrás de la crisis del matrimonio juvenil en el mundo actual

Por Nichola Taylor

 

Recientemente, apareció un video de una mujer musulmana que anunciaba que buscaba con quién casarse a través de una aplicación de matrimonio musulmán. La dama llevaba un vestido de novia y sostenía un cartel que decía que estaba lista para el nikkah.

Claramente, estas aplicaciones de anuncios de matrimonio dirigidas a musulmanes han aparecido en los últimos años, donde los musulmanes pueden crear un perfil para buscar un cónyuge.

No hay nada de malo con tales aplicaciones, siempre y cuando sigan la etiqueta y los modales islámicos. Sin embargo, esta aplicación y otras similares hacen que los musulmanes parezcan desesperados y retratan una idea equivocada sobre el matrimonio islámico.

Vivimos en un mundo digital, por lo que muchos se preguntarán, ¿qué hay de malo en buscar cónyuge en Internet? Absolutamente nada, pero hay que hacerlo correctamente.

Desfilar por las calles, vestido con un traje de novia y portando un cartel solo grita desesperación, falta de dignidad y es algo grosero.

Hay muchas maneras en que los hombres y mujeres jóvenes pueden buscar un cónyuge adecuado para casarse sin rebajarse a medidas imprudentes.

El matrimonio es cada vez más difícil

¿Por qué los musulmanes van a estos extremos en primer lugar?

La respuesta es simple: el matrimonio es cada vez más difícil en estos días debido a factores financieros y sociales, además de otros. Estamos viendo a muchos musulmanes casarse a una edad mucho mayor, algo que tiene un impacto perjudicial en nuestra comunidad.

Casarse durante la crisis financiera

El primer factor importante de la crisis del matrimonio juvenil actual es el financiero. Acabamos de salir de dos años de confinamiento intermitente en la mayor parte del mundo.

Esto ha tenido un gran impacto en la economía mundial. Este año, hemos visto dispararse los precios en todas las áreas de la vida, incluidos los precios del combustible, la energía y los alimentos.

El Reino Unido acaba de anunciar que entrará en recesión en los últimos meses del año y existe una amenaza de recesión en otros países como EE. UU. y Canadá también. Obviamente, esto afecta a todos, incluida la juventud musulmana.

Las tasas de desempleo aumentarán, sin mencionar el costo de vida, empujando a las familias a una mayor pobreza.

La pobreza también es un gran problema que ya existe en los países de mayoría musulmana, lo que hace que sea cada vez más difícil para las personas poder permitirse el lujo de casarse y tener sus propias familias. Aunque somos conscientes como musulmanes de que Dios dice:

y le dará sustento de donde no lo esperaba. Quien deposite su confianza en Dios, sepa que Él le será suficiente. Dios hará que el designio se cumpla, y ha establecido para cada cosa un término y una medida. Corán 65:3

También somos conscientes de que muchas familias no considerarán la idea de un casamiento si el futuro novio no tiene suficientes finanzas para mantener a su futura esposa.

Por lo tanto, esto ejerce presión sobre el joven y su familia y, como consecuencia, retrasa cualquier matrimonio hasta que haya logrado ahorrar suficiente dinero para mantener a su futura esposa y familia.

Esta es la razón por la que muchos musulmanes se casan a una edad más avanzada que antes. El costo de vida no va a disminuir en el corto plazo, pero las expectativas son cada vez más altas.

Entonces, ¿cómo pueden solucionar este problema? Es muy difícil navegar siendo joven en el mundo actual y viviendo en esta crisis del costo de vida que todos estamos experimentando.

Presión social en Occidente

En segundo lugar, especialmente para los musulmanes en Occidente, existe la presión social que sienten por parte de sus amigos y colegas no musulmanes.

Crecer en Occidente tiene sus ventajas, especialmente cuando ves los muchos desafíos que enfrenta el mundo musulmán. Sin embargo, también tiene sus desventajas.

Los jóvenes musulmanes ven a sus amigos no musulmanes tener relaciones fuera del matrimonio, y es normal que los no musulmanes vivan así.

Si los padres no educan adecuadamente a sus hijos e hijas sobre el Islam y por qué no se permiten las relaciones fuera del matrimonio, la tentación de nuestros jóvenes de entablar relaciones como esta será demasiado grande para resistir.

La idea del sexo fuera del matrimonio es común en todo el mundo occidental. Se promociona como algo normal y saludable. Por el contrario, esperar sexo después del matrimonio se considera algo “mojigato” y “ultraconservador”.

Puede ser peligroso para las mentes musulmanas jóvenes cuando intentan combinar los puntos de vista occidentales modernos con su identidad musulmana. Aparece la confusión y, a menudo, sienten que no encajan aquí o allá.

Como padres, debemos estar allí y estar listos para asesorarlos y guiarlos en la forma correcta de encontrar un cónyuge.

Cuando los dejemos entender el matrimonio por sí mismos, los empujaremos a sentir que necesitan tomar medidas desesperadas para casarse, como en el anuncio anterior.

Aunque no hay absolutamente nada de malo en que una mujer busque cónyuge y participe activamente en esa búsqueda, hay una forma más modesta de hacerlo.

Jadiya (RA) y su propuesta

Jadiya (RA) buscó un esposo y preguntó acerca del Profeta Muhammad (la paz sea con él) a las personas que lo conocían. Si eres mujer, especialmente una conversa sin una comunidad alrededor, es comprensible que tomes este camino cuando desees casarte.

Pero cómo lo haces es clave.

Si estás desesperada e inmodesta en tu actitud, puedes esperar amor falso y explotación de tu desesperación. En su lugar, habla con tus padres o familiares que puedan ayudarte. También puedes visitar sitios de emparejamiento de buena reputación para buscar un cónyuge. Pregúntales a las damas de la mezquita si conocen a alguien que esté listo para casarse.

Estos métodos son mejores formas de asegurarse de recibir lo que deseas: confianza mutua, respeto, amor y actitudes islámicas en tu futuro matrimonio.

Apoyarlos, no obstaculizarlos

Vivimos en un mundo cada vez más complicado para los jóvenes. Reconozcamos eso y veamos cómo podemos ayudarlos.

Si tu hijo o hija está buscando matrimonio y quiere casarse joven, no presiones demasiado al novio para que tenga el nivel de vida que tienes después de veinte o más años de trabajo y esfuerzo.

Lo mejor que se puede hacer es ofrecer apoyo financiero a la joven pareja hasta que puedan valerse por sí mismos.

Puedes ofrecerte a pagar el alquiler si todavía está en la universidad, por ejemplo. Si estamos viviendo en Occidente, tenemos que entender su realidad y cómo viven los no musulmanes.

Trata de comprender la situación en la que se encuentran nuestros hijos. En lugar de castigarlos por querer casarse para evitar la zina, debemos hacer todo lo posible para ayudarlos.

Nuestra juventud musulmana enfrenta muchos desafíos que nunca enfrentamos como jóvenes musulmanes. Viven en un mundo que promueve abiertamente que el sexo fuera del matrimonio es bueno y, sin embargo, les dicen que tienen que esperar.

Necesitan ayuda para encontrar un cónyuge adecuado y tenemos que guiarlos tanto como podamos para que no caigan en el pecado y la desesperación.

Estemos allí con un apoyo real además de muchas súplicas a Dios para que sean guiados correctamente y encuentren cónyuges para que puedan tener matrimonios felices por el resto de sus vidas.

 

Fuente: About Islam