¿Existen leyes en el Islam para proteger los derechos de los trabajadores?
«As-salamu aalaykum. ¿Podría informarme sobre los derechos de los trabajadores en el Islam?»
Respuesta del Dr. Muzammil H. Siddiqi
Wa ‘alaykum As-Salamu wa Rahmatullahi wa Barakatuh.
En el Nombre de Al-lah, el Más Misericordioso, el Más Compasivo
Todas las alabanzas y gracias son para Al-lah, y la paz y las bendiciones sean con Su Mensajero.
En esta fatwa:
1- El trabajo es un acto de adoración que tiene ciertos derechos y deberes por parte de los empleadores y también de los empleados.
2- En cuanto a los trabajadores, existen numerosos textos en el Corán y la Sunna que declaran sus derechos e instan a los empleados a mantenerlos perfectamente.
Desarrollando esto, el Dr. Muzammil H. Siddiqi, Presidente del Fiqh Council of North America, declara lo siguiente:
La justicia de los trabajadores es un tema muy importante y los eruditos musulmanes deberían debatirlo en detalle. Existe una gran necesidad de desarrollar reglas y legislaciones específicas para gobiernos y corporaciones en el mundo musulmán.
Entre los países musulmanes, que yo sepa, Pakistán e Irán tienen algunas reglas específicas en este aspecto. También es necesaria la implementación completa y adecuada de estas reglas.
Para explicar brevemente algunos valores y principios básicos relacionados con los derechos de los trabajadores, permítanme decir lo siguiente:
La justicia y los tratos justos son valores básicos del Islam y siempre deben enfatizarse. No puede existir paz y armonía en la sociedad sin justicia. Se debe hacer justicia a todas las personas. ¿Qué es la justicia?
Hay dos palabras que se usan para la justicia en el Corán: al-adl y al-qist. Adl es seguir el camino equilibrado, sin ir a un extremo ni a otro, ni extravagancia ni negligencia.
Qist significa reconocer que toda persona y todo en este mundo tiene algunos derechos. Dar a cada uno lo que le corresponde es justicia. La injusticia es privar a otros de sus derechos.
Al-lah Todopoderoso dice en el Corán: ¡Oh, creyentes! Sean responsablemente equitativos cuando den testimonio por Dios, aunque sea en contra de ustedes mismos, de sus padres o parientes cercanos, no importa si [el acusado es] rico o pobre: Dios está por encima de ellos. Que los sentimientos no los hagan ser injustos. Si dan falso testimonio o rechazan prestar testimonio [ocultando la verdad], sepan que Dios está bien informado de cuanto hacen. (An-Nisaa’ 4: 135)
Todas las personas son iguales. No importa a qué raza pertenecen, qué color tienen, de qué país vienen, cuál es su género o cuál es su ocupación. Jóvenes y viejos, ricos y pobres, blancos y negros, ciudadanos o extranjeros con permisos legales de trabajo son todos iguales; y todos deben ser respetados, honrados y tratados por igual.
Al-lah Todopoderoso dice: ¡Oh, seres humanos! Los he creado a partir de un hombre y de una mujer, y los congregué en pueblos y tribus para que se reconozcan los unos a los otros. El mejor de ustedes ante Dios es el de más piedad. Dios todo lo sabe y está bien informado de lo que hacen. (Al-Hujurat 49:13)
El Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él) dijo en su último sermón: «Oh pueblo, en verdad tu Señor es uno y tu padre es uno. He aquí, no hay superioridad para un árabe sobre un no árabe, ni para un no árabe sobre un árabe, ni para una persona blanca sobre una persona negra, ni para una persona negra sobre una persona blanca, excepto a través de la piedad». (Ahmad)
Gran respeto por el trabajo y los trabajadores
El Islam ha dado gran importancia al trabajo. Aquellos que trabajan y se ganan la vida con su propio trabajo deben ser respetados. Por supuesto, el trabajo en sí debe ser lícito y debe realizarse de manera honesta y sincera. Todas las obras antisociales, el comportamiento irresponsable y el trabajo realizado con trampas y engaños están prohibidos en el Islam. Tanto los empleadores como los empleados deben ser honestos y deben tratarse con justicia.
Sobre el trato a los trabajadores hay enseñanzas generales y específicas en el Islam. Se deben enfatizar los siguientes cinco puntos:
1- Acuerdos claros y adecuados
Todos los acuerdos, ya sean orales o escritos, deben ser claros y transparentes. Los acuerdos deben ser justos y lícitos. Los empleados deben conocer sus deberes y responsabilidades y se les debe informar sobre sus derechos en términos de vacaciones, permisos, compensaciones, etc. Al-lah dice en el Corán: ¡Oh, creyentes! Cumplan con sus compromisos. (Al-Ma’idah 5: 1) El Profeta (la paz y las bendiciones sean con él) dijo: «Los musulmanes deben cumplir sus acuerdos, a menos que exista un acuerdo que haga halal lo que es haram o haram lo que es halal». (At-Tirmidhi)
Esto significa que los términos y condiciones ilegales no son válidos según la ley islámica. Es deber tanto de los empleadores como de los empleados cumplir con sus acuerdos lo mejor que puedan.
2- La dignidad de los trabajadores
La ley islámica permite a todos los seres humanos el derecho a ejercer cualquier profesión u ocupación lícita y a realizar cualquier comercio o negocio lícito. Los trabajadores deben ser tratados con dignidad y honor. Ningún trabajo es bajo o degradante.
Nuestro Profeta (la paz y las bendiciones sean con él) besó las manos de un trabajador que le mostró sus manos ásperas debido a su arduo trabajo. Oró por él y habló muy bien de los que trabajan, en contra de los que se sientan ociosos o mendigan.
El Islam enseña que los trabajadores deben ser tratados con amabilidad.
Al-lah Todopoderoso dice:
Adoren solamente a Dios y no dediquen actos de adoración a otros. Hagan el bien a sus padres, a sus familiares, a los huérfanos, a los pobres, a los vecinos parientes y no parientes, al compañero, al viajero insolvente y a quienes están a su servicio. Dios no ama a quien se comporta como un arrogante jactancioso. Que los avaros, los que incitan a otros a la avaricia, y los que ocultan el favor que Dios les ha concedido, sepan que Dios ha preparado para los ingratos un castigo humillante. (An-Nisaa’ 4: 36-37)
3- Amabilidad con los trabajadores
Los trabajadores son nuestros hermanos y hermanas. Son nuestros ayudantes. Los necesitamos; dependemos de ellos para muchas cosas que no podemos hacer por nosotros mismos. No se debería dar trabajo a los trabajadores más allá de su capacidad. Deben tener un entorno de trabajo humano y seguro. Deberían ser compensados si se lesionan en el trabajo. Deben tener tiempo para trabajar y para ellos y sus familias.
El Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él) dijo: «Tus hermanos son tu responsabilidad. Al-lah los ha puesto bajo tus manos. Así que cualquiera que tenga un hermano bajo su mano, que le dé de comer mientras come y los vista como se viste. No les des trabajo que los sobrecargue y si les das esa tarea, entonces bríndales ayuda» (Al-Bujari)
4- Salarios adecuados y puntuales
Los trabajadores deberían recibir salarios adecuados y justos. La explotación de cualquier persona no está permitida en el Islam. Al-lah dice:
A Madián le envié [como Profeta] a su hermano Jetró, quien les dijo: «¡Oh, pueblo mío! Adoren a Dios, pues no existe otra divinidad salvo Él. Les ha llegado un milagro de su Señor [que corrobora mi profecía]. Midan y pesen con equidad, no se apropien de los bienes del prójimo, y no siembren mal en la Tierra, corrompiéndola luego de haberse establecido la justicia. Esto es mejor para ustedes, si es que son creyentes. (Al-A’raf 7:85)
Al-lah Todopoderoso advierte a aquellos que toman pero dan menos a los demás diciendo:
¡Ay de los tramposos! Que cuando compran exigen el peso exacto, pero cuando venden hacen trampa [dando menos] en el peso y la medida. ¿Acaso no saben que serán resucitados? En un día terrible, un día en el que comparecerán los seres humanos ante el Señor del universo. (Al-Mutaffifin 83: 1-6)
Los trabajadores también deberían ser pagados a tiempo. El Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él) dijo: «Dale al trabajador su salario antes de que se seque su sudor». (Ibn Majah)
5- Libertad para formar sindicatos
Basándonos en todos los principios anteriores, también podemos inferir que los trabajadores en el Islam tienen derecho a ejercer la libertad de asociación y el derecho a formar sindicatos. Los sindicatos y asociaciones especiales ayudan a los trabajadores en su trabajo y socialización. También pueden ayudar a los trabajadores a buscar justicia por sus derechos y poder de negociación para recibir compensaciones adecuadas. Sin embargo, los empleadores y los empleados deben temer a Al-lah en el ejercicio de sus derechos y deberes.
Al-lah Todopoderoso sabe más.
Fuente: About Islam