Debates reavivados cuando ciudad francesa permite burkini en piscinas
Con la llegada del verano, los funcionarios locales de la ciudad francesa de Grenoble aprobaron el lunes una decisión para permitir que las mujeres usen «burkinis» en las piscinas estatales.
La decisión, encabezada por el alcalde de Grenoble, Eric Piolle, fue aprobada por un margen mínimo con 29 votos a favor, 27 en contra y 2 abstenciones después de dos horas y media de tensos debates.
“Todo lo que queremos es que las mujeres y los hombres puedan vestirse como quieran”, dijo Piolle a la emisora RMC, informó France 24.
El burkini es un traje de baño que cubre todo el cuerpo, incluida la cabeza, dejando visibles solo la cara, las manos y los pies.
El cambio en Grenoble se produce después de las protestas en la ciudad que comenzaron en 2018. En 2020 y 2021, un grupo de activistas de la asociación de base comunitaria Alliance Citoyenne protestó vistiendo burkinis en las piscinas de Grenoble.
“Me encanta la sensación de estar en el agua, pero esas protestas fueron la primera vez que pude poner mis pies en una piscina en Francia”, dijo a FRANCE 24 Taous, una musulmana que vive en Grenoble y usa un hiyab.
Los opositores a la decisión incluyen al influyente líder conservador de la región más amplia de Auvernia-Ródano-Alpes, Laurent Wauquiez, quien prometió retirar los fondos de la ciudad.
Debate
La decisión del lunes reavivó uno de los debates más polémicos de Francia sobre la vestimenta religiosa.
No existe una ley nacional contra el burkini, pero en 2016, una serie de ciudades prohibieron la prenda en las playas, en Cannes, Córcega y Le Touquet, con el argumento de que era un símbolo religioso ostentoso en desacuerdo con el laicismo francés.
La decisión fue criticada por muchos comentaristas que ven el burkini como algo que otorga a muchas mujeres acceso a deportes y experiencias que de otro modo habrían evitado por cuestiones de salud, corporales o religiosas.
La ira se incrementó después de que una serie de fotos mostrara a cuatro policías armados con pistolas, porras y gas pimienta parados alrededor de una mujer que yacía en la playa con un pañuelo azul en la cabeza y la parte superior a juego.
En octubre de 2018, el alcalde de la ciudad de Rennes, Bretaña, en el noroeste de Francia, permitió que las mujeres usaran el atuendo en las piscinas municipales.
Fuente: About Islam